La pandemia ha descubierto la soledad que sufren millones de ancianos. La soledad puede aliviarse gracias a “personas y organizaciones de buena voluntad”.
“La vejez es muy dura”, nos dicen nuestros mayores a menudo. Aunque menos veces que las que sufren en silencio la soledad, la enfermedad, la estrechez económica o el riesgo de exclusión social: no quieren preocupar o, peor aún, no desean molestar “ni ser carga...