Ejercicios para estar en forma y adelgazar que puedes hacer en la ‘ofi’.

Ejercicios para estar en forma y adelgazar que puedes hacer en la ‘ofi’.

Después de una jornada sedentaria nos duele hasta el alma. Hay una serie de actividades que puedes hacer para poder librarte de todos tus dolores.

ADA NUÑO

Pasas ocho horas de tu vida, cinco días a la semana, sentado frente a la pantalla del ordenador, tanto que no sabes si eres tú el que la mira o si es ella la que te mira a ti. Cada vez que tus ojos apartan la vista solo pueden observar los pavimentos y edificios en la otra acera, la gente que camina por la calle en total libertad mientras tú sigues encerrado en la oficina que hace las veces de jaula. Y, por supuesto, pasas la mayor parte de ese tiempo sentado.

Como es lógico, al llegar a casa parece que te han dado una paliza mental y física. Lo único que te apetece es tumbarte en la cama a esperar que llegue otro nuevo día de rutina. Error. Es más que probable que el estar permanentemente encorvado frente a tu pantalla te provoque dolor de cuello, de espalda e incluso en algunas ocasiones dificultades para respirar. Además, llevar un estilo de vida sedentario (aunque no lo hayas elegido tú) es tremendamente perjudicial para tu salud. ¿Qué hacer entonces?

Ejercicios de estiramiento

No hace falta gastarse un pastón en el gimnasio para ir a hacer lo que perfectamente puedes realizar en el salón de tu casa. Si nunca has probado el yoga o el pilates, quizá te cueste un poco más hacer estos ejercicios, pero no te preocupes, la práctica hace al maestro. Si quieres quitarte los dolores y ese sentimiento de que eres un robot al que necesitan echar aceite, muy típico de las horas de deporte, prueba alguno de estos.

Conocida como ‘el gato’ en las clases de yoga, esta postura es estupenda para aliviar el dolor de la parte baja de la espalda. Coloca las dos manos sobre la esterilla/manta/lo que quieras usar para apoyarte e imita la postura del gato durante unos instantes.

A continuación, inclina el cuerpo como si quisieras tocar con el abdomen el suelo. Repítelo varias veces. Esta postura es conocida como ‘la cobra’ y sirve en esta ocasión para estirar la parte alta de la espalda. Puedes hacer varias repeticiones hasta que sientas cómo la tensión va desapareciendo poco a poco. Otro truco es colocarte de pie e intentar tocar tus pies. Si pruebas a hacerlo antes de estos ejercicios y después, notarás un gran cambio.

Las tablas son tremendamente buenas para ejercitar no solo el abdomen, como comúnmente se cree, sino también hombros, brazos y espalda. En muchas ocasiones, nuestra espalda sufre no solo por la falta de ejercicio, también porque no es lo suficientemente fuerte ni está entrenada. Es por ello que esta clase de ejercicios son vitales. Una tabla en la que aguantes aproximadamente treinta segundos será suficiente, luego puedes ir añadiendo más.

Al terminar, la meditación sentado con las piernas cruzadas y la espalda recta (justo lo que no haces en la oficina) te ayudará a recomponerte. Notarás que no te duele tanto como cuando empezaste. Puedes mover los hombros hacia arriba y abajo y delante y detrás. Piensa en una bola blanca que sale del centro de tu espalda y se expande hacia el cielo.

Y el cardio

Por supuesto, no engordar y mantenerte sano también estará entre tus planes, lo que puede ser un poco complicado si te pasas el día en el trabajo y solo te levantas de la silla para ir a coger unos donettes a la máquina. No obstante, si no quieres o puedes realizar un ejercicio muy intenso, caminar ahora que llega el buen tiempo puede ser la solución a todos tus problemas.

No solo disminuye el riesgo de padecer hipertensión, sino que también reduce el colesterol, previene la aparición de diabetes, aumenta los niveles de vitamina D, mejora la circulación, tonifica los músculos y reduce el riesgo de cáncer de colon y de mama. También sirve contra el estrés y mejora la vida sexual, y, según los últimos estudios, con que des entre 4.000 y 5.000 pasos al día es más que suficiente. No obstante, hay que hacer una matización: si pasas todo el día sentado eso no es suficiente y deberás aumentar tu marca: unos 12.500 pasos por día serán lo adecuado.

Y si te apetece hacer un ejercicio más intenso aprovecha que llega el verano para nadar (en una hora a crol rápido puedes perder entre 600 y 800 calorías si pesas entre 60 y 80 kilos), correr, tanto en el gimnasio como en la calle, o hacer ejercicios que combinen la fuerza y el cardio para poder acelerar el metabolismo más fácilmente. Por supuesto, el deporte también ayudará a paliar tus dolores, provocados por la falta de ejercicio. Y, de esta manera, no te sentirás tan culpable cuando llegues a la oficina el lunes sabiendo que quedan muchas, pero que muchas horas de estar sentado.