22 Ene Solo el 16% de los jóvenes españoles se ha emancipado del hogar familiar, la mitad de la media de la UE.
Los precios del alquiler (con una medida de 944 euros mensuales) dificulta la salida.
2024. Redacción
El 16,3% de los jóvenes españoles se ha independizado del hogar familiar, una tasa que sube por primera vez del 16% desde la irrupción de la pandemia, pero que supone la mitad de la media europea (31,9%).
Así consta en informe del Observatorio de Emancipación que el Consejo de la Juventud de España (CJE) presentó este martes. En el trabajo se pone de manifiesto que el 16,3% de los jóvenes españoles se ha emancipado del hogar familiar, un guarismo que sube por primera vez del 16% desde la irrupción de la pandemia, pero que supone la mitad de la media europea (31,9%).
El alquiler representa la forma más común de emancipación de los jóvenes españoles; sin embargo, la subida de los precios año tras año supera a la de los salarios jóvenes, lo que les dificulta acceder a un alquiler que represente, como máximo, el 30% del salario mediano de una persona.
En ese sentido, el precio mediano del alquiler en el primer semestre de 2023 fue el más alto desde que existen registro: 944 euros al mes, lo que supone el 93,9% del salario mediano neto de una persona joven.
Cabe destacar que el precio se encareció un 9,3% con respecto a 2022 y un 63,9% en relación al precio que tenían las viviendas de alquiler hace una década: mientras que las habitaciones se encarecieron un 7,1% en un año.
El informe atestigua que el salario mediano joven se incrementó un 5% hasta los 12.062,59 euros. A pesar de este incremento, la fuerte subida de los precios provocó que el poder adquisitivo de una persona joven trabajadores cayera un 3,3% y los ingresos de un hogar joven se redujera un 6,6%.
Por su parte, casi nueve de cada diez personas que no trabajaban ni buscaban trabajo no lo hacían porque estaban estudiando. La tasa de ‘ninis’ era de únicamente el 1,9% de la población inactiva, frente al 34% de quienes trabajaban y estudiaban.
En 2022, el 30,2% de los jóvenes se encontraba en riesgo de pobreza o exclusión social; mientras que una de cada cinco con trabajo también se encontraba en esta situación.