Reclaman una estrategia nacional sobre demencias

Reclaman una estrategia nacional sobre demencias

La Sociedad Española de Psiquiatría denuncia que el Sistema Nacional de Salud ignora este tema a pesar de reconocerlo como la segunda causa de discapacidad por trastorno psiquiátrico.

La Sociedad Española de Psiquiatría (SEP) reclama que se desarrolle una estrategia en demencias del Sistema Nacional de Salud porque, según denuncian, la Estrategia en Salud Mental del Sistema Nacional de Salud (2007) ignora por completo este tema, «a pesar de que lo reconoce como la segunda causa de discapacidad debida a trastorno psiquiátrico»,subrayaManuel Martín, director del Instituto de Investigaciones Psiquiátricas de Bilbao.

Las demencias constituyen la patología psiquiátrica con el potencial de crecimiento más importante en los próximos treinta años. Se trata de trastornos muy infrecuentes en personas jóvenes, pero muy usuales en personas mayores, especialmente a partir de los 75 años, dado que la edad es su factor de riesgo más importante. Según, «actualmente, se estima que existen en nuestro país en torno a 700.000 personas con demencia, y el número puede llegar a doblarse en los próximos veinte años, a tenor de los cambios sociodemográficos que estamos viviendo, fundamentalmente, el aumento de la longevidad».

La forma más frecuente de demencia es la que acompaña a la enfermedad de Alzheimer. Cuando pensamos en las demencias, lo primero que se nos viene a la mente es la pérdida de memoria, y efectivamente, este es el síntoma más frecuente y generalmente el más precoz.

«Pero no es el único. Además del deterioro cognitivo, el paciente experimenta en la inmensa mayoría de los casos, toda una serie de síntomas psiquiátricos y alteraciones del comportamiento», explica. «Prácticamente cualquier manifestación psicopatológica puede estar presente en las demencias, y aproximadamente el 90% de los pacientes puede experimentar uno u otro síntoma a lo largo del curso de la enfermedad», añade.

Resulta especialmente frecuente la presencia de depresión, psicosis, insomnio, agitación, apatía, cambios de personalidad y agresividad. «En la práctica, son estos síntomas los que condicionan la gravedad clínica de las demencias, junto con el deterioro cognitivo y la discapacidad funcional. Los síntomas psiquiátricos se acompañan de un deterioro más acusado del cuadro cognitivo, de un empeoramiento de la calidad de vida, y de un mayor riesgo de institucionalización en centros residenciales».

Médico de familia

El psiquiatra señala que todos estos hechos los conocen bien los médicos de Atención Primaria, que en la práctica son los que atienden casi siempre y en cualquier circunstancia a las personas con demencia. «Por otra parte, los síntomas psiquiátricos y las alteraciones del comportamiento dan lugar también a la sobrecarga del cuidador», dice. Dicha sobrecarga consiste en un estado de estrés crónico, que a la larga imposibilita al cuidador para poder seguir ejerciendo su papel como tal, además de constituir un factor de riesgo a su vez para la aparición de trastornos psiquiátricos, como depresión, ansiedad o consumo de sustancias, en el cuidador, así como un aumento de la probabilidad de tener mala salud somática. El fenómeno de la sobrecarga afecta especialmente a las mujeres, sobre todo si son más jóvenes, que todavía asumen con más frecuencia que los varones las labores de cuidado de las personas con dependencia, y que tienden a una mayor implicación emocional.

«Este conjunto de hechos hace que la Psiquiatría tenga un papel muy relevante en la atención a las demencias, como se reconoce en la mayoría de los países de nuestro entorno, pero no en el nuestro», denuncia Martín que añade que «la realidad es que sin la participación de la Psiquiatría y de las redes asistenciales en salud mental es imposible dar una asistencia correcta a las demencias, según los estándares reconocidos internacionalmente».

Colaboración

La Sociedad Española de Psiquiatría ha creado un Grupo de Trabajo sobre Demencias, cuya primera tarea consiste en definir las competencias y habilidades que debe desarrollar el psiquiatra en la atención a las demencias. «Otras especialidades médicas y profesiones sanitarias también juegan un papel importante en la atención a las demencias: psicólogos, geriatras, neurólogos, médicos de atención primaria, enfermeras, trabajadores sociales, entre otros. Y la coordinación con los servicios sociales y otros recursos de ayuda para la dependencia también es crítica»,comenta Martín.

«El problema es que existe una falta de definición de modelo y de estrategia por parte de las Administraciones sanitarias, y la heterogeneidad es muy notable en la manera de enfocar el problema en las diferentes Comunidades Autónomas y Departamentos. Por todo ello, la Sociedad Española de Psiquiatría se pronuncia por la elaboración de una Estrategia en Demencias del Sistema Nacional de Salud, y se ofrece para colaborar en la misma»,concluye.

http://www.abc.es/salud/noticias/reclaman-estrategia-nacional-sobre-demencias-9543.html