«Nos negamos a ver el viejo que seremos el día de mañana. Nos da miedo».

«Nos negamos a ver el viejo que seremos el día de mañana. Nos da miedo».

Javier Yanguas, gerontólogo y autor, explica que la vejez puede durar actualmente hasta 25 años, «el mismo tiempo que pasa desde el nacimiento de un bebé hasta la juventud, o entre la juventud a la adultez. ¿Cómo no reflexionar sobre ello?».

Laura Peraita

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Javier Yanguas, gerontólogo, Doctor en Psicología y autor de «Pasos hacia una nueva vejez» asegura que «es una vergüenza que los últimos años de nuestra existencia parezcan tiempo de descuento en el partido de la vida». En su opinión, hace falta reflexionar sobre esta cuestión y, sobre todo, recordar a toda la sociedad que la vejez cada vez ocupa una parte mayor de nuestra vida. «Antes podría durar entre 7 a 10 años, pero ahora, en el mejor de los casos, puede durar hasta 25 años en buenas condiciones. Es el mismo tiempo que pasa desde el nacimiento de un bebé hasta la juventud, o entre la juventud a la adultez. ¿Cómo no reflexionar sobre ello?».

Por este motivo, añade que en esos pasos hacia una nueva vejez es muy importante tener un proyecto de vida para vivir esta etapa con sentido. «El edadismo, como todas las fobias, resulta muy negativo. Es muy estúpido ponerse en contra de la edad porque, en realidad, todos queremos llegar a mayores. Es cierto que a nadie le gusta envejecer, nos gustaría quedarnos en una determinada edad en la que nos sentimos bien porque nos gusta la vida y pasa rápido, pero lo mejor que nos puede pasar, precisamente, es cumplir años».

El problema, según Javier Yanguas es que «nos negamos a reconocernos en el viejo que seremos el día de mañana, en el que pierde habilidades, necesitará ayuda de los demás, el que será dependiente… Nos da miedo. Nos asusta imaginarnos que algún día seremos así y optamos por centrar nuestra mirada en el presente. Nos negamos a otras realidades. Esto conlleva que no planifiquemos nuestra vejez. Nos equivocamos. Hay que tener un ojo en nuestro futuro como personas. La vida no es solo placer, también es compromiso, búsqueda de sentido…».

El autor de «Pasos hacia una nueva vejez» considera que durante la pandemia nos hemos dado cuenta de que hay muchas áreas de mejora respecto a la población mayor. «La sociedad no cuida bien a sus mayores. Es una necesidad urgente dedicar atención a este asunto porque este colectivo va a contar cada vez con menos apoyos debido a que se tienen menos hijos, no van a tener quien les cuide y, además, las actuales generaciones de jóvenes van a vivir peor que sus padres. ¿Quién les va a cuidar como se merecen? Es muy duro reconocerlo, pero esta sociedad no tiene un proyecto para la vejez. Sabemos qué esperamos de los niños en su futuro, qué esperamos de los adolescentes en su fututo, pero ¿de la vejez?, ¿qué esperamos de los mayores?».

Al hacerse estas preguntas, Yanguas recuerda que dentro de poco la población mayor representará el 25% en nuestro país. «¡Una de cada cuatro personas! Es inaudito que no se sepa qué papel juega el 25% de la población. Merece la pena reflexionar sobre ello y que se tomen medidas al respecto».



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