17 Ene Los consejos de un experto para llegar a los 100 años.
Según un especialista hay una serie de hábitos a seguir que «son más fáciles de lo que uno se imagina».
ABC
La población mayor de 64 años en España es de 9,5 millones de personas, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), a fecha 1 de enero de 2022. Entretanto, en 2021, había más de 89.000 personas mayores de 100 años en Estados Unidos, según se desprende de un artículo del New York Post.
El diario norteamericano del grupo News Corporation, resume, según relata el urólogo y andrólogo especialista en salud sexual masculina, el doctor François Peinado, «unos consejos ‘sencillos’ para llegar a centenario».
«La genética y el funcionamiento del sistema inmunitario desempeñan, según numerosas investigaciones, un papel importante en la esperanza de vida, pero los expertos coinciden en que una combinación de estilo de vida, dieta y factores sociales son elementos cruciales para lograr la impresionante hazaña de llegar a ser centenario», declara el experto.
Con todo, el especialista en salud sexual masculina, comparte y comenta algunos consejos del periódico de Rupert Murdoch para la longevidad y asegura que «son más fáciles de lograr de lo que se imagina».
Manténgase en movimiento. Si quiere aumentar su longevidad, mantenga su cuerpo en movimiento. Incluso sólo 10 minutos de movimiento al día pueden tener un gran impacto. Los estudios sugieren que sólo unos minutos de actividad física al día pueden alargar la esperanza de vida. Pero los hábitos estadounidenses son más sedentarios: los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades calculan que el 75% de los residentes en EEUU no cumple las pautas de ejercicio para una salud óptima, que son 150 minutos a la semana. La inmovilidad puede conllevar mayores riesgos para la salud, pero manteniéndose activo se puede retrasar y reducir el riesgo de patologías como la artritis, los problemas articulares y las enfermedades crónicas.
Tener amigos. La soledad es mala para el cerebro: el aislamiento se ha relacionado con el deterioro cognitivo y podría ser peor para la salud que fumar. Para combatir la actual epidemia de soledad, se ha demostrado que las reuniones sociales y la celebración de hitos vitales facilitan la felicidad y, por tanto, una vida más larga.
Dormir bien es fundamental para preservar la salud. Casi la mitad de los estadounidenses carecen de un sueño reparador, lo que se ha relacionado con el envejecimiento cerebral, la demencia, la irritabilidad y un mayor riesgo de accidentes. Aunque algunos estudios abogan por la calidad frente a la cantidad de horas de sueño, los expertos recomiendan dormir más de 7 horas por noche.
Racionalice su dieta. Las investigaciones han sugerido que las dietas cetogénicas, vegetal y mediterránea tienen factores que prolongan la vida y, ahora, los expertos creen que el ayuno intermitente también podría producir resultados beneficiosos, entre ellas, la mejora de la función metabólica, el aumento de la sensibilidad a la insulina, la reducción de los niveles de inflamación y la estimulación de la autofagia (una especie de proceso de limpieza celular). Se pueden producir mejoras a nivel molecular e indicadores de envejecimiento inverso.
Cuide lo que coma. Ciertos alimentos conllevan un mayor riesgo de consecuencias para la salud. La comida basura (los alimentos procesados), por ejemplo, se ha relacionado con un empeoramiento de la salud mental y suele estar elaborada con unas mezclas de aceites y sustancias químicas que, en exceso, pueden causar estragos en el organismo. Las sustancias químicas de ciertos alimentos afectan a las hormonas y al sistema inmunitario del organismo, por lo que conviene limitar los productos ultraprocesados o fritos. En su lugar, las personas interesadas en la lucha contra el envejecimiento deben centrarse en consumir una dieta equilibrada rica en nutrientes procedentes de frutas, verduras, hidratos de carbono complejos y proteínas, aunque consumir con moderación alimentos notoriamente «malos» no le matará.
Bañarse en agua fría. Se ha demostrado que las duchas frías refuerzan el sistema inmunitario, alivian los síntomas de la depresión, mejoran la circulación, el metabolismo y reducen el dolor y la inflamación, según UCLA Health.
Un sistema inmunitario débil deja al organismo vulnerable a virus e infecciones comunes, mientras que la inflamación crónica podría tener efectos perjudiciales sobre el corazón. Conozca su salud. Desde el año pasado, más del 70% de los estadounidenses se preocupan más por su salud después de la pandemia, y el autocuidado ocupa un lugar central. Hacer un seguimiento constante del progreso de su cuerpo y salud es importante para tener una idea clara de qué es lo que necesita mejorar y/o vigilar, como los niveles hormonales, los hábitos dietéticos y los análisis de sangre.
Mantener la curiosidad. Los estudios han demostrado que la curiosidad disminuye con la edad, por lo que es aún más importante mantenerla a medida que se envejece. Según los expertos, el afán por aprender cosas nuevas podría ser la clave de la longevidad del cerebro.
Encuentre su propósito. Tener un sentido de la vida podría mejorar la longevidad. Hay un poder transformador que surge cuando se está alineado con sus pasiones, cuando siente que sus acciones están teniendo un impacto positivo en el mundo, o cuando siente un profundo sentido de propósito en su vida. El año pasado, un estudio descubrió que el riesgo de muerte disminuía en algo más del 15% en las personas con un fuerte sentido de la finalidad, en comparación con las que sentían que tenían menos finalidad.