02 May Las personas con discapacidad exigen a Educación medidas positivas para su inclusión en Enseñanzas Superiores
El incremento de estudiantes con discapacidad en el sistema universitario ha sido considerable en los últimos años, aunque el índice de acceso es todavía muy bajo en comparación con la población con discapacidad.
Servimedia
El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) ha exigido al ministerio de Educación y al resto de administraciones educativas que adopten medidas de acción positiva para promover la inclusión educativa del alumnado con discapacidad en el sistema universitario español, donde continúa claramente infrarrepresentado.
Numéricamente, el incremento de estudiantes con discapacidad en el sistema universitario ha sido considerable en los últimos años, aunque el índice de acceso es todavía muy bajo en comparación con la población con discapacidad.
Desde el año 2007, en que se elaboró el Libro Blanco sobre Universidad y Discapacidad la población universitaria con discapacidad ha aumentado un 100%, pasando de algo más 7.000 estudiantes en ese año a más de 16.000 en 2011, según datos de la Secretaría General de Universidades del ministerio de Educación.
A su vez, se han ampliado y extendido los servicios de atención a estos estudiantes y en general han mejorado las condiciones del entorno en que se cursan los estudios. Todo esto, según el Cermi, ha contribuido a esa mayor presencia, aunque hay que decir que todavía los estudiantes con discapacidad se encuentran ante múltiples barreras y exclusiones y que son necesarias medidas de acción positiva para garantizar su derecho a la inclusión educativa.
No hay datos precisos sobre grado de accesibilidad de los campus españoles, por lo que es difícil hacer comparaciones sobre su evolución. Es cierto que en estos años, de entrada, se ha cambiado el marco normativo para hacer aplicables a las universidades las leyes de accesibilidad existentes con carácter general, lo que ha contribuido a mejorar la accesibilidad de los entornos universitarios. Constan muchas iniciativas de supresión de barreras, sobre todo de entornos que por su antigüedad eran inaccesibles. Lo nuevo que se ha ido poniendo en marcha, en general, ha partido con accesibilidad. Este proceso ha de continuar, aunque como Cermi tememos que los recortes educativos repercutirán de modo muy negativo en la mejora de las condiciones de accesibilidad de los campus. Exigimos a las Administraciones educativas que no abandone estas inversiones en ningún caso.
Empleabilidad
Entre las personas con discapacidad, más preocupante que el desempleo es la inactividad. Si la población sin discapacidad en España tiene una tasa de actividad del 75%, en el caso de las personas con discapacidad esa tasa es del 36% (datos del INE de diciembre de 2011). 40 puntos de diferencia, en contra de las personas con discapacidad.
Pero cuando se trata de personas con discapacidad con titulación universitaria, la tasa de actividad se eleva al 55% (casi 20 puntos más que la tasa general de discapacidad) lo que prueba que la formación y la cualificación mejora considerablemente la empleabilidad de este grupo ciudadano. Resulta imprescindible, pues, promover la inclusión educativa de la discapacidad en la enseñanza superior para que se normalice su situación laboral.
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