29 Dic Las buenas prácticas de la Universidad de Valladolid UVA
146 alumnos con discapacidad están matriculados este curso, quince más que el pasado año
La institución opta, con otras 47 entidades, a los Premios Telefónica Ability Awards en las categorías de accesibilidad e integración laboral
05.12.10 – 00:54 – FIDELA MAÑOSO | VALLADOLID.
Accesibilidad e integración laboral de las personas con discapacidad son las dos categorías por las que la Universidad de Valladolid se encuentra entre las 48 entidades finalistas de los Premios Telefónica Ability Awards, lo que supone un reconocimiento a la política de integración que desarrolla la institución académica.
Los Ability Awards se celebran en Irlanda, con el patrocinio de Telefónica O2, desde hace ya cinco años y han conseguido un gran impacto en el mundo empresarial y en la sociedad irlandesa. España es el primer país donde se exportan unos premios que nacieron con vocación internacional y que se prevé que se celebren en próximos años en diversos países de Europa y Latinoamérica. Esta es la primera edición de los premios en España y a la convocatoria se presentaron 458 candidaturas de todo el país. El galardón establece cinco categorías principales a las que se puede optar: compromiso de alta dirección y liderazgo de los empleados, orientación a clientes, desarrollo profesional y formación, prevención y retención, accesibilidad y reclutamiento y selección (integración laboral). Teniendo en cuenta las características de la institución académica y que algunas de las categorías llevan implícitas otras, la UVA, a través del Secretariado de Asuntos Sociales, presentó varias propuestas en diferentes categorías. El proceso de selección se inició en julio y se desarrolló por una entidad verificadora independiente y externa PwC España, cuyos técnicos visitaron las instalaciones de la UVA y se entrevistaron con diversos responsables universitarios.
Los técnicos hicieron el trabajo de campo y comprobaron ‘in situ’ si las respuestas del cuestionario respondían a la realidad. Visitaron los edificios universitarios y comprobaron que no solo los de más reciente construcción estaban adaptados a las personas con discapacidad, sino que incluso en los históricos, catalogados como Patrimonio Histórico Cultural, también se habían realizado mejoras, aunque en este caso resulta más complejo ya que cualquier intervención necesita la autorización de Patrimonio. Rampas, baños, pupitres adaptables en el aula, indicadores para personas con deficiencia visual, maquetas en relieve, escaleras, pasamanos, pruebas de selectividad, ascensores…. Comprobaron que el plan de accesibilidad de la UVA permite a las personas con alguna limitación utilizar todos los recursos que ofrece el edificio y disfrutarlos en igualdad de oportunidades.
Un total de 146 alumnos con discapacidad están matriculados en el curso 2010-2011 en la Universidad, 15 más que el pasado, fruto del trabajo previo que se desarrolla en el nivel de Bachillerato y que repercute en el acceso a los estudios superiores. El 50% tiene discapacidad física y utiliza silla de ruedas, muletas, bastones o tiene problemas de desplazamiento; el 40% de tipo sensorial (auditivas y visuales, más las primeras) y el 10% restante padece enfermedades crónicas (esclerosis, dislexia…). Pero no sólo están los alumnos, poco más de un centenar de profesores y personal de administración y servicios, en torno al 3% del total, también tienen alguna discapacidad.
La otra categoría a la que opta la UVA, denominada reclutamiento y selección, se puede traducir por integración laboral y la consultora quería saber qué tipo de contrataciones se estaba haciendo. Y comprobaron que la institución académica va más allá de lo que establece la Ley. Es decir, si en las ofertas públicas de empleo las instituciones tienen que reservar el 5% para personas con discapacidad, la UVA ha llegado hasta el 10% en algunas convocatorias.
También valoraron el hecho de que se acoja a todas las subvenciones de las administraciones públicas para la incorporación laboral de colectivos con especiales dificultades para acceder al mercado laboral ordinario, como los que tienen discapacidad intelectual, así como física o sensorial con certificado que acredita una discapacidad superior al 75%.
Desde hace años, la UVA viene adoptando medidas para que estas personas desarrollen su actividad académica y desempeñen su labor profesional universitaria. Con el fin de consolidar este proceso, en 1997 la UVA firmó un convenio de colaboración con la Junta para desarrollar el Programa de
Integración en todo su distrito universitario.
La intervención del Programa contribuye a que las personas con discapacidad puedan continuar sus estudios con la mayor normalidad posible, y para ello se coordina con diferentes servicios universitarios como los de Alumnos, Pruebas de Acceso, Unidad de Arquitectura o el Servicio de Personal.
Este enfoque transversal y coordinado de atención a estas personas, incluido en la institución académica como entidad socialmente responsable, es el que ha valorado y comprobado el jurado de los premios Telefónica Ability.
La UVA ya es, por lo tanto, una compañía Ability,
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