11 Dic La violencia machista contra niñas y adolescentes crece un 87% en cuatro años.
La Fundación ANAR ha elaborado un estudio a partir de las llamadas y testimonios recibidos entre 2018 y 2022. Durante este tiempo, la organización ha atendido a un total de 20.515 víctimas menores de edad.
EFE 24/10/2023
La Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo) ha constatado un incremento de la violencia que sufren niñas y adolescentes. Ha aumentado un 39,7% en cuatro años y tiene especial incidencia de la violencia machista (un 87%). Asimismo, advierten de una tendencia a la normalización de determinadas conductas violentas, ya que el 70% no denuncia.
Son algunos de los principales datos que recoge el estudio Evolución de la violencia contra las mujeres en la infancia y adolescencia en España (2018-2022). El informe está elaborado a partir del análisis de las llamadas y testimonios que llegan a esta organización a través de las distintas Líneas de Ayuda ANAR.
En este periodo de tiempo, ANAR ha atendido a 20.515 niñas, niños y adolescentes víctimas de violencia y ha dado respuesta a 382.219 peticiones de ayuda. Entre estos casos, hay madres que sufren violencia de género con hijos e hijas menores de edad (que directa o indirectamente también son víctimas), adolescentes que en sus relaciones de pareja padecen de violencia machista y mujeres jóvenes que sufren otros tipos de violencia como agresiones sexuales, ciberacoso, grooming, etc.
Entre las principales conclusiones, ANAR ha destacado el aumento de un 39,7% de menores de edad atendidas por violencia contra las mujeres en sus cuatro variantes: violencia de género, doméstica, sexual y otro tipo de violencia física o psicológica.
Las consultas por violencia machista aumentan un 87%
Las llamadas por violencia machista representan el 53,8%. Se trata del tipo de violencia que más crece entre 2018 y 2022. El dato que más preocupa es el de que el 47,1% de las mujeres no son conscientes de estar siendo víctimas. Asimismo, el 70,3% no denuncia ni tiene intención de hacerlo.
En el periodo de estudio, ANAR ha recibido 16.846 consultas y ha atendido a 11.031 niños, niñas y adolescentes por violencia de género, el 86,7% sufrida en su entorno y el 13,3% restante ejercida por otro adolescente.
La edad media de los menores que sufren violencia machista en su entorno es de diez años. El 56,6% son mujeres y el 43,4% varones, el rendimiento escolar es bajo, viven mayoritariamente en familias monoparentales, normalmente con la madre y en más de la mitad de los casos, la familia es migrante.
En el caso de la violencia machista entre adolescentes, ANAR ha atendido a 1.468 niñas y adolescentes, con un crecimiento del 87,2% desde 2018, y la edad media de las víctima es de 16 años.
El perfil de estas chicas es de una estudiante de secundaria o Bachillerato, en la mitad de los casos con un rendimiento escolar bajo, de nacionalidad española en casi siete de cada diez casos y que vive mayoritariamente en familia.
ANAR ha constatado un aumento significativo de la implicación de las nuevas tecnologías en este tipo de violencia, especialmente en la ejercida entre iguales y a partir de la pandemia, cuando se ha incrementado un 82%.
Asimismo, ha comprobado cómo en el 48,8% de los casos existe un problema de salud mental, con ideación e intento de suicidio en el 17,9% de los casos, problemas de conducta (10,2%), y autolesiones (7,7%). Además, denuncia que la mayoría de los niños, niñas y adolescentes no reciben tratamiento psicológico.
La violencia sexual aumenta un 39,4%
ANAR ha atendido en cuatro años a 2.400 niñas y adolescentes afectadas por violencia sexual, tecnológica, pornografía, prostitución y aborto forzoso. Además de a 3.815 niñas y adolescentes por violencia doméstica, con casos de maltrato físico y psicológico y también negligencias como abandono.
Por otra parte, 3.260 niñas y adolescentes han llamado para reportar casos de acoso escolar, agresiones físicas y verbales, ciberacoso y violencia institucional. En todos estos casos, el perfil de la víctima es el de una niña de 12 años. Un 13,9% padece algún tipo de discapacidad y en el 71,6% de los casos el rendimiento escolar es medio o bajo. El 73,5% de las víctimas de este tipo de violencia no reciben tratamiento psicológico.
Del total de llamadas atendidas por cualquier causa de violencia, el 70,1% de los problemas fueron considerados de gravedad alta y un 52,8% de urgencia alta. A raíz de esto, desde ANAR se realizaron 108.562 derivaciones a recursos sociales de infancia y adolescencia.
El agresor suele ser el novio de la víctima
El agresor de la violencia machista se identifica con el novio actual de la víctima, según advierte ANAR. Normalmente, la edad de los agresores coincide con la de las víctimas, pero en tres de cada diez son mayores de edad.
Cuando hablamos de violencia machista en el entorno, en el 90% de los casos el agresor es el padre, que usa al menor como instrumento para ejercer la violencia. En cuanto a las otras formas de violencia, en el 52,5% de los casos es un familiar o una persona muy conocida por el menor y el más común es el padre o padrastro (83,9% de los casos). Mientras que en los casos de acoso escolar, los agresores son menores de la misma edad y no suelen actuar en soledad.