La sonrisa de la discapacidad

La sonrisa de la discapacidad

El nadador paralímpico es el rey de las redes sociales riéndose de sí mismo y de su discapacidad
Cree que es la fórmula para normalizar la situación

Xavi Torres revolucionó las redes sociales el día que Messi recibió el trofeo a mejor jugador de Europa por parte de la UEFA. El nadador paralímpico, que nació sin manos y sin piernas hace 41 años, puso un tuit en su cuenta (@xavi_torres) comparándose con el trofeo que recibió el argentino. Por supuesto, se hizo viral. «Me llamaron después para entrevistarme desde Panamá, Argentina… El móvil echaba humo», dice riendo.

Quienes le siguen saben de su sentido del humor y también de lo habitual que es en él reírse de sí mismo en las redes sociales, pero aquel tuit trascendió más de lo esperado. «Al aparecer una persona como Messi todo se multiplica», reconoce. A pesar de ser uno de los deportistas paralímpicos más laureados de España, con 16 medallas paralímpicas en seis Juegos (Barcelona, Atlanta, Sidney, Atenas, Pekín y Londres), mucha gente le ha empezado a conocer a raíz de ese comentario.

Optimista dese pequeño

¿Y no le da rabia que después de tantos años en la élite de la natación le conozcan por algo anecdótico? «No, bienvenido sea porque el mensaje ha tenido así mayor repercusión: hay que saber llevar las cosas con humor y reírte de ti mismo», dice.
Y eso lo aprendió desde pequeño gracias a sus padres. «En mi casa probablemente cuando nací no era lo que esperaban. Siempre he sido objeto de la curiosidad de los demás, las miradas o los giros de la gente eran muy habituales cuando era un niño. Con 6 ó 7 años tenía un juego con mi padre que era ir agarrados por la calle, contar hasta tres y los que nos girábamos éramos nosotros para pillar a la gente que se volvía a mirarme. Con esta situación, que te puede provocar un trauma porque todo el mundo te mira, hasta me lo pasaba bien», cuenta. Ese optimismo es lo que hace a Xavi único a la hora de bromear con un tema en principio tan serio.

«Hacer bromas ayuda a normalizar la situación. Siempre intento personalizar para que no pueda molestar a otro. A veces soy un poco bruto pero con las bromas he ayudado a gente a cambiar el chip o a sacar una sonrisa. Aunque las cosas sean complicadas nunca son tan tremendas», dice.

Maestro de los jóvenes

Este mensaje es el que trata de transmitir a través de sus charlas a los niños en los colegios o en un ámbito más profesional. Combina esta faceta con sus colaboraciones en radio y televisión y, sobre todo, con su cargo como responsable, junto a José Luis Vaquero, del Equipo de Promesas Paralímpicas de AXA, integrado por los nadadores más jóvenes que tienen cualidades para llegar lejos.

«Me pongo más nervioso con los chavales que cuando competía yo. Acompañarles en este camino es lo más parecido a cuando disfrutaba de mi carrera deportiva», reconoce. «Hay relevo generacional garantizado para el presente y para Tokio», asegura Xavi.

La piscina es su vida y él sigue nadando a diario, aunque más «de forma terapéutica», como cuando empezó de niño.

Su medalla de barro

Aunque Xavi Torres se convirtió en una leyenda de la natación paralímpica gracias a sus 16 medallas en Juegos, hay una muy especial para él, una que no tiene tanto valor económico pero sí sentimental. Es su medalla de barro. «El año que Barcelona fue designada sede de los Juegos, fui a un campamento de verano en el que organizaron una especie de Juegos con pruebas de varios deportes. Yo participé en varias y al final del día nos daban un trocito de barro para que nos hiciésemos el premio. Yo me hice una medalla en la que escribí Barcelona 92 y, seis años después, estuve allí en mis primeros Juegos. Fue un sueño cumplido y la guardo todavía con mucho cariño».

www.marca.com/2015/10/02/mas_deportes/paralimpicos/1443784288.html



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