07 Feb La obesidad aumenta el deterioro cognitivo como el alzhéimer.
Un estudio confirma la correlación entre la neurodegeneración en personas obesas y pacientes con demencias.
Raquel Bonilla
La obesidad en ningún caso resulta un buen compañero de viaje, ya que dispara el riesgo de padecer patologías cada vez más comunes, como la diabetes, la hipertensión, las enfermedades cardiovasculares e incluso algunos tipos de cáncer. Y sus secuelas pueden ser duraderas a largo plazo, ya que se ha demostrado que el exceso de kilos daña la salud, incluso cuando se logra perder peso.
Y ahora hay nuevos argumentos para evitar la obesidad, ya que un nuevo estudio dirigido por científicos de «The Neuro» (Montreal Neurological Institute-Hospital) de la Universidad McGill, en Canadá, han encontrado una correlación entre la neurodegeneración en personas obesas y pacientes con enfermedad de Alzheimer (EA), lo que sugiere que perder el exceso de peso podría retrasar el deterioro cognitivo en el envejecimiento y reducir el riesgo de demencias, tal y como se publica hoy en la revista científica «Journal of Alzheimer’s Disease».
En concreto, investigaciones anteriores ya habían demostrado que la obesidad está vinculada con los cambios relacionados con la enfermedad de Alzheimer, como el daño cerebrovascular y la acumulación de beta-amiloide. Sin embargo, hasta la fecha ninguna investigación ha realizado una comparación directa entre los patrones de atrofia cerebral en la EA y la obesidad.
Detalles del estudio
Utilizando una muestra de más de 1.300 personas, los investigadores compararon los patrones de atrofia de la materia gris en la obesidad y la enfermedad de Alzheimer. Así, compararon a los pacientes con alzhéimer con controles sanos y obesos con individuos no obesos, creando mapas de atrofia de materia gris para cada grupo. De esta manera, los científicos han encontrado que la obesidad y la enfermedad de Alzheimer afectaban el adelgazamiento cortical de la materia gris de manera similar. Este adelgazamiento cortical puede ser un signo de neurodegeneración, lo que sugiere que la obesidad puede causar el mismo tipo de neurodegeneración que se encuentra en las personas con alzhéimer.
«Nuestro estudio refuerza la literatura previa que apunta a la obesidad como un factor importante en la enfermedad de Alzheimer al mostrar que el adelgazamiento cortical podría ser uno de los posibles mecanismos de riesgo», asegura Filip Morys, investigador de doctorado en «The Neuro» y primer autor del estudio. «Nuestros resultados resaltan la importancia de disminuir el peso en personas obesas y con sobrepeso en la mediana edad, para disminuir el riesgo posterior de neurodegeneración y demencia», añade.
«The Neuro», el Instituto-Hospital Neurológico de Montreal, es un destino líder en el mundo para la investigación del cerebro y la atención avanzada del paciente. Desde su fundación en 1934 por el renombrado neurocirujano Dr. Wilder Penfield, ha crecido hasta convertirse en el centro clínico y de investigación especializada en neurociencia más grande de Canadá, y uno de los más grandes del mundo. La perfecta integración de la investigación, la atención al paciente y la capacitación de las mentes más importantes del mundo hacen que «The Neuro» esté en una posición única para tener un impacto significativo en la comprensión y el tratamiento de los trastornos del sistema nervioso.