HABILIDADES para VIVIR BIEN

HABILIDADES para VIVIR BIEN

Recién estrenamos 2019 y junto a los propósitos a alcanzar en los 365 días restantes hasta la próxima Nochevieja, no estaría de más contar con una caja de herramientas que ha demostrado ser eficaz para lograr nuestros objetivos.

Muchos años han transcurrido desde que se publicara la Carta de Ottawa para la Promoción de la Salud en 1986, y que posteriormente desarrolló la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1999, ahora hace 20 años. La OMS define las Habilidades para la Vida (HdV) como “destrezas psicosociales que facilitan a las personas enfrentarse con éxito a las exigencias y desafíos de la vida diaria” (Mantilla, 2001), posibilitando la adquisición de competencias y habilidades específicas a nivel físico, psicológico, social, cognitivo, moral y vocacional (Mantilla, 199) para transformar actitudes, conocimientos…, que facilitarán a cada persona, el saber qué hacer y cómo hacerlo.

Las habilidades personales, interpersonales y sociales permiten controlar y dirigir el curso de la vida, desarrollando así la capacidad de vivir y de convivir. Para ello es necesario facilitar el apoyo social a las personas que lo precisen, que junto a los factores sociales y culturales y la capacidad de motivación y de adaptación a las circunstancias de cada momento, hará que tomemos conciencia de la importancia de adquirir estas herramientas para lograr un comportamiento positivo, para con uno mismo, y con los demás.

Las habilidades para la vida según Melero (2010) son las siguientes:

1. CONOCIMIENTO DE SÍ MISMO: Reconocimiento de nuestra personalidad, características, idiosincrasia, fortalezas, debilidades, aspiraciones, expectativas, etc.

2. EMPATÍA: Capacidad para ponerse en el lugar de otra persona y desde esa posición captar sus sentimientos.

3. COMUNICACIÓN EFECTIVA O ASERTIVA: Habilidad para expresarse de manera apropiada al contexto relacional y social en el que se vive.

4. RELACIONES INTERPERSONALES: Competencia para interactuar positivamente con las demás personas.

5. TOMA DE DECISIONES: Capacidad para construir racionalmente las decisiones cotidianas de nuestra vida.

6. SOLUCION DE PROBLEMAS Y CONFLICTOS: Destreza para afrontar constructivamente las exigencias de la vida cotidiana.

7. PENSAMIENTO CREATIVO: Utilización de los procesos de pensamiento para buscar respuestas innovadoras a los diversos desafíos vitales.

8. PENSAMIENTO CRÍTICO: Capacidad para analizar con objetividad experiencias e información, sin asumir pasivamente criterios ajenos.

9. MANEJO DE SENTIMIENTOS Y EMOCIONES: Reconocimiento y gestión positiva de nuestro mundo emocional.

10.- MANEJO DE LAS TENSIONES Y EL ESTRÉS: Capacidad para reconocer nuestras fuentes de tensión y actuar positivamente para su control.

Estas son las herramientas, que aprendiendo a usarlas bien y poniéndolas en práctica participando activamente en la sociedad, junto a una actitud positiva ante los retos a afrontar, así como el cuidado de la salud, una dieta saludable, y ejercicio físico y mental, harán que nuestras metas sean alcanzables. Sonrían a la Vida, y le sonreirá.

Ana I. Esteban
Presidenta de Solidaridad Intergeneracional