«El perfil del cuidador está cambiando mucho»

«El perfil del cuidador está cambiando mucho»

La Fundación Ozanam inicia sesiones gratuitas dentro de su Programa de Apoyo al Cuidador. Desde la SEGG se ha propuesto declarar el 5 de noviembre como el Día de la Persona Cuidadora

M. M. P. – Zaragoza

Factores demográficos, socioeconómicos y las propias realidades que impone la crudeza de la crisis económica en los hogares españoles está haciendo que el perfil de los cuidadores no profesionales que tradicionalmente se han hecho cargo de los familiares enfermos en casa -generalmente, mujeres de mediana edad y sin trabajo por cuenta ajena-, esté cambiando radicalmente durante los últimos años.

Situaciones en las que la persona que asume la responsabilidad del dependiente en muchas ocasiones acaba sufriendo el llamado síndrome del cuidador, un trastorno que presentan las personas que han asumido como rol principal el de cuidar a una persona dependiente, a nivel físico o cognitivo, y que no siempre son fáciles de reconocer ni de paliar. “Muchas personas no saben dónde acudir y no conocen los recursos que tienen a su alcance”, explica Vanesa Martínez Catón, psicóloga especialista en psicología de la vejez de la Fundación Federico Ozanam.

Esta institución es una de las que desarrolla un Programa de Atención al Cuidador, por el que a lo largo de todo el año ofrecen de manera gratuita para toda la población atención personalizada, talleres en grupo y charlas abiertas, como las que se celebran esta semana bajo el título ‘Consejos para afrontar la sobrecarga del cuidador’. Serán todas a las 11.00, el lunes 22 en el Centro Cai-Ozanam (C/ José Luís Pomarón, 7); el martes 23 en el Centro de día Cai-Ozanam de la Calle Venecia y el viernes 26 de septiembre en la Residencia Cai-Ozanam Oliver. Toda la información sobre este programa se puede obtener en el 976 44 33 66 ó en el email: apoyofamilias@ozanam.com

Asimismo a partir de octubre van a dar comienzo grupos de apoyo a cuidadores. Se trata de talleres para ayudar al cuidador, con el fin de que tenga un tiempo de respiro y encuentre en ellos un espacio donde expresarse. Con plazas limitadas, son diez sesiones distribuidas en tres meses. Además, la Fundación Ozanam ofrece gratuitamente la posibilidad de cuidar al enfermo durante el tiempo que el cuidador pase en las sesiones. Son talleres para aprender a convivir con las conductas del enfermo con deterioro cognitivo, y en la que se aportan pautas de actuación de cómo manejar situaciones como delirios, alucinaciones o problemas de memoria.

Desde Ozanam subrayan la importancia de tratar los síntomas de este síndrome del cuidador, si bien la evolución de cada persona “depende mucho de cada caso, de la situación de cada enfermo, y también influyen mucho los recursos económicos de la familia”, explica Catón. “Muchas veces esa situación se convierte en una lucha diaria contra la enfermedad y eso provoca un estrés continuado”.

Estrés, ansiedad y depresión son los principales riesgos para el cuidador que, “conforme va pasando el tiempo y va asumiendo una gran carga física o psicológica, va perdiendo paulatinamente su independencia, se desatiende a sí mismo, deja de salir con los amigos y paraliza su proyecto vital”, explica Catón. Cefaleas, dolores musculares, alternaciones de sueño, mareos o irritabilidad son otras posibles consecuencias a nivel físico. “Al final se enfadan con el enfermo y se produce un círculo, eso es lo que más se ve”, apunta, por lo que “es importante involucrar a otros, no ser el único cuidador y tener momentos de respiro”.

Dada la dificultad de recopilar numéricamente estas situaciones, es difícil contar con datos que dibujen la realidad de este colectivo. Según datos del IMSERSO del pasado julio, en Aragón hay 17.583 beneficiarios con prestación de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia y de ellas, 9.488 reciben prestación para cuidados en el entorno familiar. Datos que no contemplan situaciones de cuidadores que no han solicitado ayudas o que teniéndolas concedidas, no las han recibido.

Cambio de perfil

Desde Ozanam advierten cambios en estas situaciones familiares. “El perfil típico es el de una mujer de mediana edad, muy voluntariosa, que no trabaja y se hace cargo de un familiar directo, pero ahora estamos viendo que este perfil está cambiando mucho”, explican desde Ozanam, como hijos que dejan de trabajar para cuidar de sus hijos o parados que asumen el rol de cuidador. El retraso a la hora de tener hijos también está afectando en estas situaciones, y “hay parejas que se encuentran con que tienen que hacerse cargo al mismo tiempo de sus hijos pequeños y de sus padres, y en esos casos el nivel de estrés es altísimo”, subrayan desde Ozanam.

Por su parte, desde la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), su vicepresidenta, Pilar Rodríguez, apunta a dos factores básicos en este cambio de roles. “La sociedad en general tiene mayor esperanza de vida y la incorporación masiva de la mujer al mundo laboral hace que haya más hombres cuidadores”, explica Rodríguez, quien destaca el incremento de “hombres que se han jubilado en buen estado de salud y cuidan de sus mujeres”.

“Lo de cuidar al cuidador es esencial en la sociedad”, subraya la también presidenta de la Fundación Pilares, por lo que desde estas instituciones se trabaja en la concienciación sobre los riesgos a los que están sometidas estas personas. Entre otras acciones, han publicado el Manual de buena práctica en cuidados a las personas mayores y el Manual de Habilidades para Cuidadores Familiares de Personas Mayores Dependientes, descargables en su página web.

Asimismo, se está trabajando por que el 5 de noviembre se declare Día de la Persona Cuidadora. Primero se presentará la iniciativa en el IMSERSO ese mismo día de este año, y posteriormente se elevará la iniciativa a la Unión Europea y a Naciones Unidas.

www.heraldo.es/noticias/suplementos/salud/2014/09/22/cuidar_cuidador_esencial_para_sociedad_311400_1