03 Oct DÍA MUNDIAL DEL ALZHEIMER. Un día para no olvidar
Hoy, 21 de septiembre, se celebra el Día Mundial del Alzheimer. En España hay 600.000 personas con esta enfermedad, pero muchos están sin diagnosticar
ABC – MADRID
Entre el 30% y el 40% de las personas que tienen alzhéimer podría estar sin diagnosticar. Y la cifra aumentaría hasta el 80% en los casos en los que la patología está en estadio leve. Son datos que ha hecho públicos la Sociedad Española de Neurología (SEN), con motivo de la celebración, hoy 21 de septiembre, del Día Mundial del Alzheimer.
Según sus estimaciones, unas 600.000 personas padecen alzhéimer en España, y se prevé que el número de casos aumente de forma muy considerable en las próximas décadas: en 2050 podrían existir más de 1,5 millones de personas afectadas en España.
Por ello, la organización ha destacado la necesidad de promover una coordinación «eficaz» entre la Atención Primaria y Especializada para mejorar la respuesta ante los pacientes afectados por alzhéimer.
«La investigación clínica diagnóstica y terapéutica sigue siendo crucial, y es una línea prioritaria de muchos centros de investigación públicos o privados. Es esencial ser cada vez más precisos con el diagnóstico y las enfermedades asociadas, así como evaluar nuevas terapias en fases muy iniciales de la enfermedad o en sujetos con un riesgo muy elevado de demencias», señala el coordinador del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la SEN, Guillermo García Ribas.
Se sabe que existen factores que pueden ayudar a modificar el inicio de la enfermedad y se ha referido a diversos estudios que indican que los hábitos de vida saludables pueden reducir hasta el 40% de los casos de alzhéimer. Por ello los expertos recomiendan potenciar las actividades cognitivas (leer, estudiar, hablar varios idiomas, practicar juegos intelectuales, relacionarse con gente, participar en actividades de grupo), controlar los factores de riesgo vascular (azúcar, colesterol, hipertensión, obesidad), llevar una alimentación equilibrada, realizar ejercicio físico y abandonar el hábito del tabaco. Un reciente estudio señalaba que el tabaco, diabetes, hipertensión y obesidad favorecen la enfermedad de Alzheimer y que si se controlaran, se mejorarían las predicciones de incidencia de alzhéimer para 2050, al menos en los países desarrollados.
Diagnóstico precoz
Detectar a las personas que puede tener alzhéimer es u n y en el intervienen desde las modestas consultas de atención primaria hasta los avances diagnósticos más complejo. Uno de ellos los está probando la Clínica Universidad de Navarra, que ha puesto en marcha una prueba con un nuevo radiofármaco PET (Tomografía por Emisión de Positrones) para ayudar al diagnóstico precoz de esta. La prueba está indicada en pacientes con síntomas clínicos de deterioro cognitivo, y detecta si los depósitos de amiloide están elevados en el cerebro, factor que supone una evidencia de la enfermedad de Alzheimer y cuya detección —hasta la aprobación de dicho radiofármaco— sólo se podía constatar post mortem.
Según Javier Arbizu, «con este radiofármaco PET podemos observar y cuantificar la densidad de las placas de amiloide en el cerebro, cuya acumulación es una de las características histopatológicas de la enfermedad de Alzheimer».
El nuevo radiofármaco es el 18FFlorbetapir, un marcador de la proteína beta-amiloide que se acumula de forma patológica en los cerebros de los pacientes que desarrollan enfermedad de Alzheimer. Dada la actual inexistencia de un tratamiento curativo para esta dolencia, disponer de pruebas que ayuden a establecer un diagnóstico precoz aporta una serie de ventajas al paciente, entre otras, la administración de fármacos que ralentizan la progresión de la enfermedad. Sin embargo, Arbizu subraya que la prueba PET para observar la existencia de placas de amiloide «no permite hacer el diagnóstico. Esta prueba debe realizarse en el contexto de un paciente con síntomas iniciales de deterioro cognitivo que todavía no cumple todos los criterios diagnósticos. El neurólogo puede solicitar esta prueba para determinar con más seguridad la causa de la demencia, es decir, en el caso de que sea positiva aumenta la probabilidad de que el diagnóstico clínico corresponda a una enfermedad de Alzheimer».
Según Mario Riverol, neurólogo de la Clínica y especialista, una de las ventajas del diagnóstico precoz es la predictiva. «Es decir, podemos saber qué pacientes con un deterioro cognitivo ligero tienen un riesgo aumentado de presentar demencia tipo alzhéimer y, por el contrario, quienes tienen un riesgo muy bajo». Por otra parte, hay pacientes que presentan síntomas de demencia en los que pueden establecerse dudas diagnósticas respecto a qué tipo de demencia padece. Esta prueba puede disipar dichas dudas, ofreciendo un diagnóstico más preciso.
Tratamientos
Además, el neurólogo indica que el tratamiento farmacológico temprano en pacientes con enfermedad de Alzheimer «ayuda a mejorar su evolución. A nivel cognitivo, estas terapias consiguen ralentizar la evolución de la enfermedad, en cuanto a mantener la estabilización cognitiva y la autonomía personal. A nivel conductual evitan la aparición de síntomas con elevada repercusión en su entorno más próximo, como es el familiar». Entre estos síntomas figuran las ideas delirantes, la irritabilidad o la agresividad. En esta línea, el doctor Riverol subraya que «hay evidencias claras de que comenzar el tratamiento de forma temprana es mejor, aporta más beneficios, que empezarlo más tarde».
En la actualidad hay cuatro fármacos que pueden mejorar los síntomas cognitivos conductuales y funcionales de la enfermedad. Además, son fármacos que pueden estabilizar entre uno y dos años la evolución de los síntomas y que pueden incluso retrasar la necesidad de ingreso en residencia.
www.abc.es/salud/noticias/20140921/abci-alzheimer-mundial-201409191754.html