02 Mar Descalabro laboral: los sénior empiezan 2023 con pérdida de 100.000 contratos respecto a hace un año.
España destruye casi 400.000 contratos en un año, y uno de cada cuatro lo pierden los mayores de 45.
Pepa Montero
El año 2023 ha comenzado con mal pie en cuanto a cifras de paro (el desempleo creció en 70.744 personas en enero, superando de nuevo los 2,9 millones de parados) y también en volumen de afiliación a la Seguridad Social (se perdieron 215.047 cotizantes en el primer mes de 2023), certificando la pronosticada ralentización del mercado laboral español, si bien el Gobierno insiste en ver el vaso medio lleno y destaca que ha sido «el mejor enero» de la historia en creación de empleo, en palabras de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
Igualmente, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha quitado hierro al repunte del paro, argumentando que se trata de un mes donde habitualmente sube el desempleo y que «este incremento ha sido más moderado que la media histórica y que otros eneros recientes».
Pero las estadísticas no dejan lugar a dudas, y también la evolución de la contratación constata el empeoramiento, puesto que en enero en España se han firmado únicamente 1.200.749 contratos, que suponen 395.583 menos que en igual mes de 2022, es decir, en un año se han perdido casi 400.000 empleos en el conjunto del país, según reflejan las estadísticas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), dependiente del Ministerio de Trabajo.
En esta destrucción del volumen global de contratación, los trabajadores sénior vuelven a encajar un revés, pues empiezan 2023 sufriendo la pérdida de casi 100.000 contratos respecto a hace un año (ver tabla inferior). En concreto, los mayores de 45 años firmaron en enero tan solo 355.376 contratos, lo que significa -99.648 en relación con el mismo mes de 2022, o lo que es lo mismo, experimentan un descenso del 21,9% con respecto al empleo que tenían hace un año.
En la comparativa mensual (enero de 2023-diciembre de 2022), la contratación de séniors sí aumentó levemente, en 13.336 empleos, pero se trata de una subida muy escasa que no palía en nada la destrucción laboral experimentada por este colectivo en su evolución anual.
El empeoramiento del mercado laboral, que constatan las estadísticas del SEPE, afectan en enero a todos los grupos de edad, y de hecho, los empleados entre 25-44 años pierden más de 228.000 contratos, mientras los más jóvenes (menores de 25 años) se dejan algo más de 67.000 empleos con relación a enero de 2022.
El tercer peor dato de contratos en un año
Los 355.376 contratos de séniors registrados en las oficinas del SEPE a comienzos de este año suponen la tercera peor cifra cosechada desde hace un año por los trabajadores mayores de 45 años, después de los 342.040 empleos logrados en diciembre pasado, y los 343.625 conseguidos en agosto de 2022, según reflejan los datos oficiales.
2022 ya certificó la destrucción de empleo sénior
Los varapalos para el empleo sénior no son temporales, ni un bache momentáneo, ya que el año 2022 cerró con una clara destrucción de empleo sénior con respecto a 2021, según las estadísticas laborales del pasado mes de diciembre, lo que certifica las enormes dificultades de los trabajadores mayores de 45 años para continuar o abrirse camino en el mercado laboral, donde la edad se erige en una barrera a su contratación, puesto que las empresas prefieren incorporar a sus plantillas a personas con experiencia, pero más jóvenes.
De hecho, del total de 1.189.917 contratos realizados en diciembre en 2022, los mayores de 45 años solo lograron 342.040, según detallan las estadísticas del SEPE de dicho mes.
En el conjunto de 2022, se destruyó empleo en 8 de los 12 meses (ver tabla superior). Tanto en enero, febrero y abril, como en julio y agosto, la cifra de contratos a mayores fue de signo negativo, al igual que sucedió en el último trimestre del año, cuando en octubre, noviembre y diciembre se produjeron igualmente descensos en la contratación de empleados sénior.
El empleo indefinido se ralentiza
En enero de 2023, en España se registraron un total de 1,2 millones de contratos en las oficinas del SEPE, de los que algo más de medio millón, 530.306, eran de carácter indefinido (el 44,16%), lo que el Ministerio de Trabajo interpreta como que «se sigue afianzando la tónica de estabilidad en la contratación», cuando se cumple poco más de un año de la entrada en vigor de la reforma laboral, que precisamente fomenta el empleo estable y desincentiva el temporal.
De ese más de medio millón de empleos fijos, los mayores de 45 años únicamente lograron 158.401, una cifra bastante inferior a los 198.753 puestos indefinidos que las empresas ofrecieron a trabajadores entre los 30-44 años. Estos datos oficiales reflejan, por lo tanto, la tradicional mayor predisposición de las empresas a incorporar a su plantilla a mano de obra experimentada, pero más joven.
Las estadísticas ponen de relieve asimismo la pérdida de fuelle de la contratación sénior indefinida, que desde septiembre del año pasado se ha ido ralentizando: entonces se contabilizaron 204.231 contratos de este tipo a mayores de 45 años, que descendieron a 187.008 puestos de trabajo fijos en octubre y volvieron a disminuir en noviembre, hasta 170.269 empleos para mayores de 45 años.
Los dos últimos meses, diciembre de 2022 y enero de 2023, la contratación indefinida continúa en niveles muy bajos (131.814 y 158.401 empleos, respectivamente), sobre todo teniendo en cuenta que la reforma laboral lleva algo más de un año en vigor, y el objetivo del Gobierno es erradicar el empleo inestable y temporal.