05 Sep Paro sénior: Los mayores de 45 sufren en agosto su peor cifra de contratos desde la pandemia.
Los 277.633 empleos sénior logrados en agosto son el peor resultado desde mayo de 2020.
2024. 65Ymás
Pepa Montero
España ha perdido 193.704 empleos en el peor mes de agosto en cinco años, debido, sobre todo, al descenso de la ocupación en la educación en más de 70.000 personas y al retroceso del empleo en construcción e industria, lo que reduce la afiliación media hasta 21.189.402 cotizantes. A su vez, el número de parados se ha incrementado en 21.884 personas en este mes.
Para el Gobierno, estas cifras no son preocupantes, sino achacables al efecto estacional veraniego. «Hemos consolidado los 21,1 millones de trabajadores y estamos muy cerca de los 21,2 millones en un mes con un fuerte comportamiento estacional», ha destacado la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz.
Sin embargo, los resultados de agosto son desoladores para el colectivo de los trabajadores sénior, que sufren una fuerte erosión de la contratación, tal como certifican las estadísticas publicadas este martes por el Ministerio de Trabajo, a cuyo frente se halla la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz.
En efecto, los mayores de 45 años han firmado en agosto únicamente 277.633 contratos, lo que significa un descenso de 94.553 respecto a los obtenidos en julio (el -25,4% en tasa mensual) y una disminución de 14.782 puestos de trabajo en comparación con hace un año (el -5,06% interanual).
El volumen de contratos realizados a personas sénior en agosto es el resultado más negativo del año 2024, y ahonda la caída del empleo que ya padeció este colectivo en agosto de 2023, puesto que hace un año, los mayores de 45 firmaron únicamente 292.415 contratos (ver gráfico inferior).
De hecho, la debacle sénior en agosto de 2024 es de tal calibre, que se trata de la peor cifra de contratación en cualquier mes desde la pandemia del Covid-19; en concreto, hay que remontarse a mayo de 2020 (249.105 contratos) para encontrar un menor número de puestos de trabajo conseguidos por los mayores de 45 años (ver gráfico inferior).
Verano ‘horribilis’ para el empleo sénior
Un mes más, las estadísticas oficiales constatan que las empresas prefieren incorporar a sus plantillas a trabajadores más jóvenes: frente a los 277.633 empleos sénior citados, las compañías han contratado a 484.295 personas de 25 a 44 años y han fichado a otros 278.231 trabajadores menores de 25 años.
Los sénior tampoco salen bien parados en cuanto a la calidad del empleo logrado. De acuerdo con los datos del SEPE, en agosto los mayores de 45 años contabilizan tan solo 98.717 contratos indefinidos, que supone el peor resultado de los últimos dos años.
Ya sea con contratos indefinidos o temporales, lo cierto es que el verano de 2024 ha sido ‘horribilis’ para los mayores de 45 años, puesto que en junio experimentaron una pérdida de 26.209 puestos de trabajo, que fueron prácticamente los mismos que firmaron y recuperaron en julio, con lo cual el saldo queda en tabula rasa. El nuevo mazazo de agosto, con una destrucción de casi 100.000 empleos, empeora la situación para el empleo sénior en el octavo mes del año. Habrá que esperar a septiembre a ver si se confirma esta erosión de puestos de trabajo.
El verano de 2024 empeora con mucho el resultado del verano de 2023, que ya fue un periodo negro para su contratación, pese a tratarse de una época en la que el empleo suele aumentar por el turismo. No obstante, los mayores de 45 años perdieron contratos en junio de 2023 (-16.325), en julio (-27.147) y volvieron a sufrir una erosión mayor en agosto (-55.067). De hecho, las estadísticas del SEPE muestran que el peor resultado del empleo sénior en 2023 se dio en agosto.
Las dificultades de los sénior para mantener o encontrar un nuevo empleo son muy preocupantes, teniendo en cuenta que a los mayores de 45 años les faltan un mínimo de 20 años para la jubilación, y si antes de eso pierden el empleo, o no logran reengancharse cuando se quedan descolgados del mundo laboral, ello les acarrea consecuencias nefastas para la pensión futura.
Asempleo: 1 de cada 5 parados lleva más de 4 años inactivo
Un total de 585.000 desempleados, el equivalente al 20,5% de personas en paro (1 de cada 5), lleva más de cuatro años sin trabajar, según datos publicados por Asempleo, con graves consecuencias, que afectan tanto a su situación económica como a su bienestar psicológico y social, al tiempo que corren el riesgo de quedar expulsadas del mercado de trabajo.
«Después de cuatro años fuera del mercado laboral, es probable que las habilidades del trabajador hayan quedado obsoletas (…). La falta de acceso a formación continua y la ausencia de experiencia reciente dificultan la adaptación a las nuevas tecnologías, lo que reduce considerablemente sus oportunidades de conseguir un nuevo empleo», advierte Andreu Cruañas, presidente de Asempleo.
Una situación especialmente preocupante en España, pues junto a Italia lidera el paro de muy larga duración en Europa, siendo ambos países los únicos que aún superan el medio millón de desempleados en esta situación.
Mujer, 45+ años, perfil del paro de muy larga duración
El perfil del parado de muy larga duración en España se corresponde una mujer de más de 45 años, «lo que las hace más vulnerables a la discriminación por edad en los procesos de selección no profesionalizados» y las sitúa mucho más lejos de la digitalización que un perfil más joven, detalla Asempleo, que reclama implementar programas de formación continua que se centren en habilidades tecnológicas, digitales y en sectores emergentes; y ofrecer formación gratuita o subvencionada con modalidades flexibles que se adapten a las circunstancias de los desempleados.
«Las personas con dificultades para su reingreso al mercado laboral, especialmente las que superan los 52 años, deben afrontar, además, una gran incertidumbre sobre su jubilación futura, lo que repercute directamente en la sostenibilidad del sistema de pensiones», señala Andreu Cruañas.
Autónomos alertan de la pérdida de negocios
España ha perdido en el mes de agosto, según los datos medios de afiliación al RETA, una media de 327 autónomos cada día, pasando de 3.381.485 autónomos en julio de 2024 a 3.371.350 en agosto de 2024, lo que supone un descenso de 10.135 autónomos y una pérdida del 0,3%, según denuncia la federación de autónomos ATA, que preside Lorenzo Amor.
“Las empresas y los autónomos lo que necesitan en estos momentos es confianza, seguridad jurídica y certidumbre”, reclama Amor, que recuerda que en toda España en los dos últimos meses ha habido una pérdida de 203.000 empleos, el peor dato de la suma de julio y agosto en la última década. «En julio y agosto se ha destruido empleo, ha aumentado el paro, ha bajado la contratación y se han perdido más de 15.000 autónomos en estos dos meses», subraya el presidente de ATA.
Por su parte, la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) advierte de que en España se han perdido 6.409 comercios en un año, lamentando que el final de la temporada estival tradicionalmente tenga un efecto directo en la afiliación de los trabajadores por cuenta propia, que tiene como consecuencia pérdida cuantiosa de pequeños negocios.
«El final de la época estival trae consigo un nuevo comienzo del desplome del comercio minorista, asignatura pendiente que debe ser tratada con urgencia, puesto que el comercio que se pierde desaparece en zonas de ámbito rural», ha avisado el presidente de UPTA, Eduardo Abad. Por ello, UPTA pedirá en este próximo curso político un plan especial, fiscal y económico, para la creación de trabajo autónomo en los ámbitos menos poblados del país, con «fiscalidad cero», durante los tres primeros años de existencia en poblaciones de menos de 5.000 habitantes.
