03 Nov Abrazo en familia.
¿Tú sabes a dónde irán los abrazos que no damos?
Solidaridad Intergeneracional
No hay nada como un abrazo … Llevo tiempo buscándolos, pero no los encuentro. Abrázame, y no me digas nada, solo abrázame Este gesto cariñoso lo aprendemos pronto. Pasamos de brazos en brazos, casi el primer año de la vida. Este contacto genera apego, confianza, seguridad. Un abrazo es grandioso y humilde. Basta con abrir los brazos, acercar los corazones unos segundos para que los sentimientos se acurruquen y brote la sonrisa en nuestros ojos mientras las cálidas y amorosas manos nos rodean. ¿Dónde se guarda el abrazo que no se da? ¡Cuánto los extraño! Un abrazo es un «Te quiero» sin palabras; un abrazo es la alegría de «Qué bien que estás aquí»; un abrazo es un «Ayúdame»…! un abrazo es un «Hasta luego», o un «Te perdono» o “Lo siento” y también “Aquí estoy para lo que necesites”. (Abrazos de P. Neruda) No hay nada como los abrazos … curan casi todo: la tristeza, el dolor, el cansancio, los malos entendidos, los miedos…, incluso la soledad. Cuando abrazamos somos mucho más que dos: somos familia, somos cordiales, somos sueños posibles…! (Abrazos de P. Neruda) A veces cuesta encontrarlos porque lo esencial es invisible a los ojos. Pero tu siempre recuerda que tienes un tesoro inagotable de abrazos que quieren ver la luz.