27 Dic El desayuno, clave para mejorar el rendimiento académico.
Así lo ha demostrado una reciente investigación de la Universidad de Valencia.
S.F
Salir de casa con el estómago vacío no es una buena idea. El desayuno es clave para mejorar el rendimiento académico de los estudiantes, tal y como ha demostrado una reciente investigación de la Universidad de Valencia (UV).
Si bien es verdad que no se ha demostrado que el desayuno sea la comida más importante del día, como siempre se ha dicho, Nerea Gómez Fernández y Juan Francisco-Albert han comprobado la relación que existe entre la primera comida del día y el rendimiento escolar: los alumnos que desayunan antes de ir a la escuela obtienen puntuaciones más altas en matemáticas y ciencias.
«En base a estos resultados, consideramos que sería recomendable desarrollar políticas dirigidas a incentivar a los adolescentes a desayunar, tales como programas de desayunos escolares o políticas de concienciación en redes sociales, para aprovechar todos los beneficios que conlleva el hábito de desayunar, incluyendo las ventajas a nivel académico demostradas en esta investigación», aseguran los autores de ‘¿Afecta al rendimiento académico saltarse el desayuno?’.
Se trata de la primera investigación internacional que analiza esta relación. «Nuestro estudio es el primero que utiliza evaluaciones internacionales (datos de PISA) para medir la relación entre el desayuno y el rendimiento académico -explican-. Además, es novedosa porque se centra en el análisis del conjunto de países de la OCDE que participan en PISA 2015. Hasta la fecha, los estudios anteriores que han analizado esta relación se han basado en contextos muy particulares de regiones específicas, lo que en muchos casos limita la validez de los resultados. Nuestra investigación pretende superar estas limitaciones al disponer de un gran número de observaciones y poder evaluar diferentes regiones y países».
Ciencia y matemáticas
Para llegar a esta conclusión, los investigadores cogieron la oleada de PISA 2015, unas pruebas que se llevan a cabo cada tres años y las realizan estudiantes de 15 años en matemáticas, ciencias y lectura. En esta encuesta, se pide a los estudiantes que informen si desayunan antes de ir al colegio. Los resultados muestran que en países como Austria, Eslovenia y Singapur, alrededor del 35% de los estudiantes encuestados indicaron que no desayunar antes de ir a su centro educativo. En el lado opuesto se sitúan China, Portugal o Japón, donde solo el 10% sale de casa con el estómago vacío. En España, este porcentaje se sitúa en el 15,42%.
Tras analizar los resultados, los investigadores de la UV encontraron que «desayunar antes de ir a la escuela se asocia con puntuaciones más altas en las pruebas PISA en las competencias de matemáticas y ciencia». Sin embargo, esta relación no está clara en la competencia lectora.
Por ello, Nerea Gómez Fernández y Juan Francisco-Albert consideran que «sería recomendable desarrollar políticas dirigidas a incentivar a los adolescentes a desayunar, tales como programas de desayunos escolares o políticas de concienciación en redes sociales, para aprovechar todos los beneficios que conlleva el hábito de desayunar, incluyendo las ventajas a nivel académico demostradas en esta investigación».