27 Dic El 40% de los mayores de 65 años tienen este problema en el hombro.
La degeneración de los tejidos está detrás de la mayoría de las lesiones.
Paula Buedo
Los músculos y tendones del hombro están sometidos a una gran tensión que genera numerosos problemas traumatológicos que afectan a un importante número de personas en España. Una de las más frecuentes es la rotura del manguito rotador. Según los expertos, el 40% de los mayores de 65 años enfrentan esta rotura o desgaste, lo que supone alrededor de 4 millones de personas mayores afectadas por esta patología en nuestro país.
Médicos especialistas han tratado este problema en la inauguración del II Santurce Arthroscopy Meeting, una cita que ha reunido a más de 100 traumatólogos en el Hospital San Juan de Dios de Santurtzi. En la primera mesa de este curso, dirigido por los doctores Manuel Martín Montes, Jon Elorriaga Vaquero e Iban Aransáez Aguirre y avalado por la Asociación Española de Artroscopia y la Sociedad Española de Cirugía de Hombro y Codo, se han abordado los avances de la patología traumática del hombro, incluyendo los aspectos ligados al diagnóstico, tratamiento y rehabilitación.
Esta rotura dificulta la vida cotidiana. El manguito rotador es el encargado de posibilitar el movimiento del hombro. Cuando el tendón se desgarra o se desgasta, el brazo pierde fuerza y un dolor sordo se instala en el hombro. Movimientos como levantar el brazo para peinarse, tocarse la espalda o descansar por las noches se convierten en una tarea imposible y dolorosa.
Causas
La principal causa de la lesión es la degeneración natural de los tejidos. Con el paso de los años, se van desgastando y aumenta el riesgo de padecer este tipo de patologías degenerativas que limitan la movilidad.
«La longevidad de la sociedad hace que nuestros tendones del manguito también sean partícipes de esa longevidad y, por tanto, de la degeneración de los tendones, que conlleva lesiones y roturas, provocando limitaciones en los pacientes”, explica a Infosalus el expresidente de la Asociación Española de Artroscopia y jefe de servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital IMED de Valencia, Eduardo Sánchez Alepuz.
No obstante, la edad no es el único desencadenante de la lesión en los tendones del hombro. Algunos deportes, como el baloncesto, el béisbol o el tenis también pueden llevar a una rotura del manguito. De la misma manera, trabajos repetitivos y manuales, especialmente si se realizan por encima de la cabeza o aplican una tensión continuada en la zona del hombro, como los de la albañilería o carpintería, aumentan el riesgo de padecer problemas en los tendones.
Otros motivos o factores de riesgo que pueden encontrarse detrás de este problema son los golpes, caídas, movimientos repentinos o levantamiento de peso excesivo. Estas causas son las más frecuentes en gente joven que experimenta esta lesión.
Posibles soluciones
Las soluciones que se ofrecen son diversas y adaptadas a cada caso. La intervención quirúrgica no se contempla como primera opción en la mayoría de los pacientes. En lugar de esto, se puede optar por alternativas como la rehabilitación a través de ejercicios que alivien los síntomas y contribuyan a aumentar la fuerza de estos músculos que rodean la articulación.
Otra vía para tratar la lesión es aplicar un tratamiento que bloquee la transmisión nerviosa del dolor. De esta manera, el malestar no llega hasta el cerebro y la movilidad del hombro no se ve afectada.
La cirugía se reserva para aquellos casos en los que la rotura del tendón no se debe a la degeneración. En estos casos, sí es necesario intervenir sobre el tejido alrededor de la articulación para repararlo. El procedimiento consiste en introducir una cámara en el hombro a través de unas pequeñas incisiones para poder ver la lesión y solucionar el problema.
En los últimos años, los tratamientos han experimentado numerosos avances. Los expertos destacan que, ahora, la solución va más allá de la mera reparación mecánica de los tendones. Hoy se cuenta con la posibilidad de reforzar el área afectada con implantes biológicos. El resultado de este avance es que se consigue que el tendón sea más fuerte y resistente.
El futuro de los tratamientos
No obstante, se siguen buscando soluciones que mejoren la reparación y recuperación de los pacientes. Algunos tratamientos con plasma rico en plaquetas y células troncales no han terminado de satisfacer las expectativas.
En España, un nuevo tratamiento biológico, llamado Regeneten, se postula como prometedor. Esta solución consistiría en implantar una malla de colágeno sobre el tendón lesionado para contribuir a regenerarlo. Los resultados preliminares de los ensayos clínicos están siendo positivos.