28 Jun Estos son los síntomas que alertan de una trombosis.
La formación de trombos puede dificultar la circulación de la sangre en nuestro cuerpo, por lo que identificar sus síntomas rápidamente puede evitar problemas de salud mucho más graves.
María Albert
La trombosis es es una dolencia que afecta a muchos españoles y que puede llegar a suponer un importante peligro para la integridad de muchos de ellos. Esto ocurre cuando la sangre se solidifica en una vena o arteria y que puede llegar sin previo aviso, manifestándose en pocos días y, en el peor de los casos, en horas.
Su aparición puede dificultar la circulación normal de la sangre y dicha coagulación puede ser peligrosa, especialmente si se sitúa en zonas sensibles y si la intensidad del bloqueo afecta severamente.
Eso sí, es fácilmente identificable, por lo que aprender a reconocer los síntomas si estás experimentando un trombo puede servir para prevenir problemas mayores que la hinchazón y el dolor en las extremidades inicial que se puede manifestar.
Pero ¿Cuáles son los síntomas que alertan de la formación de trombos en nuestro cuerpo? ¿Qué debemos hacer en caso de sufrir alguna de estas dolencias? ¿Cómo se puede prevenir la trombosis?
Síntomas que alertan de la formación de trombos
- Hinchazón en la zona afectada por el trombo: es el síntoma principal y más identificable de esta dolencia y es habitual que tan solo se manifieste en una extremidad
- Dolor: junto a la hinchazón, se puede dar esta sensación de dolor
- Enrojecimiento o decoloración: la zona afectada por el trombo puede presentar cambios en el tono de la piel habitual, que suele presentarse en forma de enrojecimiento y/o brillo en la piel
- Sensación de calor: la extremidad afectada también puede cambiar de temperatura y volverse mucho más caliente de lo habitual, llegando a aparecer fiebre
¿Qué hacer si tengo síntomas de trombosis?
Con el paso del tiempo, estos síntomas pueden ir a más, especialmente si los experimentamos cuando nos encontramos de pie. Así, acudir a un médico puede ser la mejor opción para tratar esta dolencia y que sea un experto el que analice y decida las medidas a tomar.
Dirigirte a un especialista en la materia es importante, porque la presencia de trombos también puede provocar otros peligros, además de ocasionar graves problemas de salud. En caso de que estos terminen en el pulmón, se puede llegar a producir una embolia pulmonar, mientras que si sucede en las venas profundas de las piernas, podemos hablar de la peligrosa Trombosis Venosa Profunda.
[Efectos secundarios de la furosemida, el popular diurético para reducir la retención de líquidos]¿Cómo se pueden prevenir los trombos?
A la hora de evitar que se produzca esta dolencia, hay que tener en cuenta que existen ciertos factores de riesgo que pueden ayudar a que estas se produzcan con mayor frecuencia.
Es el caso de las personas recién operadas, que tienen más riesgo de sufrirlas, al igual que sucede con las personas mayores de 65 años. Tomar hormonas, como puede ser la píldora anticonceptiva o los tratamientos tras haber sufrido cáncer, también es un factor de riesgo a tener en cuenta en la formación de trombos. En caso de experimentar una rotura de hueso o un gran moretón o pasar mucho tiempo en la misma postura, habrá que estar atento porque también pueden ser situaciones en las que puede producirse trombosis.
Por otra parte, la obesidad y el sedentarismo pueden provocar que la trombosis se produzca más habitualmente. Las personas que han sufrido un infarto cerebral o que estén paralizadas también tienen más riesgo. Además, las venas varicosas o enfermas, los problemas de corazón o la presencia de coágulos deberían mantenernos alerta a la hora de hablar de la formación de trombos.