13 May Convivir con una discapacidad.
En pleno siglo XXI siguen latentes prejuicios y mucha discriminación.
David Gómez, Alejandra Carmona y Javier Rodríguez
A las personas con discapacidad nos cuesta un poco adaptarnos a situaciones de la vida diaria o a las relaciones con otra gente, pero muchas veces se nos olvida que a la frase “con discapacidad” le precede la palabra personas. Con un poco de ayuda podemos ser igual de eficaces o más que el resto de la gente.
Sabemos que en unas pocas décadas hemos conseguido grandes avances en bienestar y en derechos, y eso ha hecho mejor a nuestra sociedad, pero también sabemos que queda mucho camino por recorrer, sobre todo en eliminar los prejuicios del resto.
En nuestra opinión a las personas con discapacidad, tanto intelectual como física, no se nos ve ni trata como a otras personas, lo cual es discriminatorio. Y aunque a lo largo de los años la visión de la discapacidad haya ido cambiando, en pleno siglo XXI es triste tener que recordar que somos exactamente igual que el resto. Creemos que mucha parte de esa discriminación la sufrimos personas con discapacidad intelectual, ya que no siempre tenemos los apoyos ni las ayudas que necesitamos.
Algunos de nosotros nos sentimos excluidos por tardar un poco más en realizar tareas, pero no significa que no sepamos o no podamos llevarlas a cabo. Aunque haya camino hecho hay que seguir avanzando en la sociedad para que realmente se eliminen los prejuicios y uno de esos avances es tratar de forma respetuosa a las personas con discapacidad. Esperamos que pase poco tiempo para el día en que seamos tratados como los demás.