Cómo ayudar a las mujeres en riesgo de exclusión a encontrar un empleo.

Cómo ayudar a las mujeres en riesgo de exclusión a encontrar un empleo.

Un programa de voluntariado de Bristol Myers Squibb y Fundación Adecco lo consigue.
Las mujeres adquieren competencias profesionales y los voluntarios conciencia del problema.

20minutos

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En España más de 4 millones de mujeres entre 16 y 64 años se encuentran en riesgo de pobreza y/o exclusión. Es el 28% de las que están en edad laboral. El desempleo es el principal desencadenante de esta situación.

No hay que olvidar que la tasa de paro femenina alcanza un 15%, mientras que la masculina se sitúa en el 11,7%, y que son ellas las primeras en retirarse del mercado laboral cuando así lo requiere la situación familiar: 2,9 millones de mujeres no trabajan por motivos familiares y/o domésticos, una cifra casi 7 veces superior a la de los hombres (430.600).

En este contexto, la Fundación Adecco y la compañía Bristol Myers Squibb (BMS) han llevado a cabo durante el último año un voluntariado enmarcado en el programa #EmpleoParaTodos. El objetivo ha sido facilitar el acceso al mercado laboral a mujeres en riesgo de pobreza o exclusión.

El programa de voluntariado de BMS y la Fundación Adecco, que ya va por su tercera edición, se ha dirigido a 14 mujeres con certificado de riesgo de exclusión: víctimas de violencia de género, con responsabilidades familiares no compartidas, con discapacidad o mayores de 50 años. La mayoría de ellas contaban con escasa formación y con experiencia en el sector servicios.

El plan de trabajo que se ha llevado a cabo en esta edición ha comenzado con una entrevista en profundidad con cada beneficiaria para detectar sus fortalezas y necesidades. Posteriormente, Fundación Adecco ha diseñado un itinerario personalizado, que ha incluido un análisis de la trayectoria, estudio de competencias y definición del objetivo profesional.

Mejorando su empleabilidad

Una vez diseñado el itinerario, se han sucedido los encuentros con los voluntarios de BMS (formación, polivalencia, atención al cliente, ventas, equipo, imagen y selección) y prácticas no laborales en otras compañías.

El desempleo es el principal desencadenante de una situación de riesgo de pobreza y/o exclusión

Una vez finalizado el programa, 10 de las 14 beneficiarias (un 71,4%) han conseguido un puesto de trabajo, y todas han mejorado su empleabilidad. Cinco de ellas han empezado a trabajar en supermercados, dos en residencias, otras dos en labores de limpieza y una más, en tareas administrativas.

Además de la satisfacción por poder ayudar, los 25 voluntarios de BMS han conocido las barreras a las que se enfrentan las mujeres en riesgo de exclusión a la hora de buscar trabajo, desmontando así los prejuicios que surgen como consecuencia del desconocimiento y acercándose a la realidad que viven muchas mujeres en nuestro país.