31 May “La longevidad debe convertirse en un eje de crecimiento económico en España”.
El centro de investigación Ageingnomics analiza las oportunidades del envejecimiento.
Beatriz Torija
En lugar de abordar el envejecimiento de la población como un problema, deberíamos empezar a poner el énfasis en las oportunidades que brinda. Esta es una de las principales conclusiones que recientemente se han puesto sobre la mesa en un seminario online con motivo de la presentación del Centro de Investigación Ageingnomics, de la Fundación Mapfre, en Argentina, concretamente en la Universidad de San Andrés.
“El efecto combinado del aumento de la longevidad y la disminución de la natalidad, que es lo que produce el envejecimiento de las poblaciones se ha abordado tradicionalmente en clave de los problemas que ese cambio estructural acarrea: las dificultades para la sostenibilidad de los sistemas de pensiones, de los sistemas de salud, de los cuidados a largo plazo apersonas dependientes” ha dicho Juan Fernández Palacios, director del Centro de Investigación Ageingnomics de la Fundación Mapfre. Sin embargo, “se ha puesto poco énfasis en el aprovechamiento y en cúmulo de oportunidades que el envejecimiento poblacional nos brinda”.
“Hablamos de envejecimiento, pero se puede hablar de rejuvenecimiento”, apuntó Fernández Palacios. “Porque eso es lo que ocurre en el plano personal cuando aumenta la esperanza de vida, entre otras cosas porque a este aumento se une la mejora de las condiciones físicas e intelectuales de quienes alcanzan la edad madura”. En su opinión, es necesario un cambio de actitud y una revisión de los estreotipos culturales, lo que está en nuestras manos. “Y debemos ponerlo en marcha sin dilación”, porque “no somos más viejos, sino más longevos. Esto es un buen descubrimiento”.
Mayores, un puntal de crecimiento económico
Para Juan Martín, máximo responsable del Centro Internacional sobre el Envejecimiento (CENIE), la longevidad debería de ser uno de los ejes preferenciales para el modelo de crecimiento económico. “España puede convertirse en una referencia mundial haciendo de ello un objetivo prioritario e inexcusable”, explica, porque disfruta de una climatología envidiable, variedad paisajística y cultural, un modelo de relación y convivencia abierto, dinámico, acogedor, vitalista y muy atractivo.
“Pocas otras causas serán tan beneficiosas a nivel social”, adelanta. “Y casi ninguna podría comparársele en términos de generación de empleo, nuevas profesiones y prestaciones basadas en una mejor capacitación y excelencia, puntales de un sector económico emergente con enorme impacto futuro”, añade.
“Por supuesto, tenemos que preocuparnos y ocuparnos, incluso con urgencia, de resolver el tema de las pensiones, de la salud o de la dependencia, pero no a costa de obviar los efectos potencialmente positivos de la transición demográfica” ha dicho Juan Fernández Palacios. “Es la economía de los seniors o la economía plateada. A partir de los 60 años, son personas que muy a menudo cuentan con salud y calidad de vida, capacidad de ahorro y consumo y que están en disposición de seguir aportando mucho a la sociedad”, añade.
Fernández Palacios, quien antes de asumir la dirección del Centro ha sido consejero delegado y vicepresidente de Mapfre Vida, aspira a un mundo en el que los sénior tengan “la consideración y el protagonismo que merecen y la sociedad necesita, como un grupo activo y participativo en la economía y el voluntariado, y con actitud de disfrutar de ese regalo que supone una vida más larga y saludable”.
La pandemia, ¿un revulsivo?
Según Fernández Palacios, la Covid-19 ha sacado a relucir las “enormes carencias” de nuestro sistema de atención a los mayores en muchos otros países; y ha puesto de manifiesto la urgente necesidad de reformular ese sistema, “por justicia hacia nuestros padres y abuelos, y por la cuenta que nos tiene, porque todos estamos abocados a pasar por esa situación”. Nada debería suscitar más consenso que el apoyo a la construcción de un sistema que ha de ser respetuoso con su dignidad, al tiempo que eficiente, seguro y de calidad. Ahí se abre un abanico de oportunidades para proyectos empresariales y de voluntariado que, desde el centro de investigación, quieren apoyar.
La consecuencia inmediata de la crisis ha sido un cierto cambio de actitud en la consideración de los mayores, que vemos reflejado en medios audiovisuales y escritos, en series y en un vehículo tan popular como el cine. “Se trata de consolidarlo, de no volver a las andadas y adoptar las medidas e incentivos necesarios para impulsar el cambio de modelo en la dirección apuntada”, subraya Fernández Palacios. “Confío en que iniciativas como la de Mapfre con el CIA, y otras de carácter público o privado, contribuyan a hacer realidad lo que hasta ahora son, fundamentalmente, buenas intenciones”.