04 Jul ¿Qué es el ruido blanco y cómo nos puede ayudar a la hora de dormir?
Un sonido plano y constante que hace que no se active nuestra corteza cerebral y no nos despertemos.
VICTORIA HERRERO
Todos alguna vez, y más de una, nos hemos quedado dormidos viendo la televisión o escuchando la radio. Puede ser debido a que nos encontrábamos cansados o al efecto que producen ciertos ruidos a la hora de ayudarnos a conciliar el sueño. Es lo se conoce como el ruido blanco; un sonido constante y uniforme que también podemos asociar a los aparatos de aire acondicionado o incluso en aplicaciones móviles o aparatos tecnológicos específicos para este fin.
¿Cómo actúa este tipo de ruido para que durmamos mejor?
Esta señal hace que no se active la corteza cerebral durante el sueño como sí provocan otro tipo de sonidos que son los responsables de que nos despertemos y no tengamos un descanso continuado. Y es que su principal característica es que no sobresale ningún tono por encima de otro. Algo así como un sonido ambiente que deja en segundo plano aquellos ruidos que podrían sobresaltarnos.
Este tipo de sonidos (por ejemplo, el sonido de una lavadora antes del centrifugado, de una campana extractora, de un secador de pelo, de la lluvia o las olas) suelen ser muy usados cuando un bebé se encuentra agitado y no hay forma de calmarle y que deje de llorar.
Así, tanto para niños como para adultos, este tipo de sonidos nos ayudan a tranquilizarnos y sumergirnos en una cálida sensación que invita al descanso y a que, por fin, podamos cerrar los ojos y durmamos.
UNA AYUDA PARA EL INSOMNIO
Este sonido se presenta, entonces, como una alternativa para poder conciliar el sueño; especialmente en aquellas personas que sufren de insomnio y se pasan horas dando vueltas en la cama sin pegar ojo. Según la Sociedad Española de Neurología (@seneurologia) entre un 10% y un 15% lo sufre de forma crónica en nuestro país.
Una situación que se incrementa con la llegada del verano debido al calor y al aumento de horas de luz. Para facilitar el descanso, te ofrecemos una serie de consejos naturales con los que tus párpados no resistirán abiertos:
Tu dormitorio tiene que invitar al descanso. Por eso tenlo bien ventilado, que sea confortable térmicamente y nada de televisor ni móvil en la mesilla.
* Si tienes mascota, es mejor que no duerma contigo ya que podría despertarte y desvelarte en mitad del sueño.
* Tómate una infusión o una bebida caliente como leche para ir relajándote poco a poco. Un puñado de cerezas también te ayudarán.
* Date un baño con agua caliente antes de dormir para haga un efecto sedante sobre tu sistema nervioso.
* No hagas ejercicio a última hora del día, ya que estarás excitado y te costará dormir.