02 Jun La pobreza afecta a 155.000 mayores madrileños y tiene rostro de mujer
En el informe de CCOO, se analizan indicadores demográficos, económicos, sanitarios y sociales, y concluye que los mayores madrileños son cada día más vulnerables por los recortes y las políticas de austeridad que imponen los gobiernos central y autonómic
Madrid – EFE
La tasa de riesgo de pobreza y exclusión social en la Comunidad de Madrid roza el 15 por ciento de la población mayor de 65 años, lo que supone que unas 155.000 personas, en su mayoría mujeres, son pobres.
Esta es una de las conclusiones del informe de CCOO «Aproximación a la situación de las personas mayores en la Comunidad de Madrid» que hoy han presentado el secretario general del sindicato en la región, Jaime Cedrún; la secretaria de Política Social e Igualdad, Ana González; y el secretario general de la Federación de Pensionistas y Jubilados, Manuel Ariza.
En el estudio se analizan indicadores demográficos, económicos, sanitarios y sociales, y concluye que los mayores madrileños son cada día más vulnerables porque sobre ellos «se ceban» los recortes y las políticas de austeridad que imponen los gobiernos central y autonómico.
En la Comunidad de Madrid viven 1.053.000 personas mayores de 65 años -el 16 por ciento de la población- y el 21 por ciento de ellas residen solas, en su mayoría mujeres (29 por ciento), lo que aumenta el grado de riesgo social al haber «mermado los apoyos» que requieren por las políticas de reducción del gasto social.
El informe de CCOO señala que en esta región la pobreza afecta ya al 14,7 por ciento de la población mayor de 65 años (155.0000 personas) y tiene rostro femenino: el 18 por ciento de los pobres son mujeres frente al 10% que son hombres.
Este dato guarda una estrecha relación con que las cuantías mínimas de las pensiones «rocen el umbral de pobreza» y con el incremento de la carestía de la vida (luz, gas…).
Pese a ello, cada día son más los hogares madrileños sustentados por personas mayores de 65 años, lo que convierte a este colectivo en un factor de «contención» de situaciones de crisis familiar.
En el ámbito sanitario y social, el estudio ahonda en el incremento del copago farmacéutico de los jubilados (seis veces más que la subida de las pensiones) y del que se ha impuesto al servicio de ayuda a domicilio, con un coste de 1,70 euros por hora para una pensión de 632 euros.
Paralelamente, la «amenaza» se cierne sobre la Ley de Dependencia, con problemas de gestión, retrasos administrativos y limitación de recursos que hacen que en la región haya 9.000 personas dependientes reconocidas pero no atendidas.
Además, desde el Gobierno de Ignacio González -denuncia CCOO- se favorecen las prestaciones económicas para cuidados en el entorno familiar frente a la atención en plazas residenciales, con un coste más elevado.
En este escenario, el secretario general del sindicato, Jaime Cedrún, ha criticado que sean los pensionistas quienes tengan que «pagar las alegrías fiscales» del Gobierno regional, cuyas políticas de «austeridad» y modelo «ultraliberal» está provocando un aumento de la pobreza y la desigualdad en esta región.
Por ello, ha demandado un tratamiento especial al IVA de productos de primera necesidad; la elaboración de un plan de emergencia social para familias en riesgo de exclusión; y un cambio de política hasta conseguir «pobreza cero» en esta región.
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