Hipertensión y sedentarismo, una pareja mortal

Hipertensión y sedentarismo, una pareja mortal

La hipertensión es un enemigo mortal, silencioso y es uno de los principales factores que contribuyen a causar cardiopatías y accidentes cerebrovasculares

S. GUTIERREZ

Hipertensión, tabaquismo, diabetes y sedentarismo constituyen los cuatro factores más prevalentes asociados con la enfermedad cardiovascular, la principal causa de muerte en el mundo. Con ocasión del Día Mundial de la Salud, celebrado el pasado 7 de abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha hecho un llamamiento para intensificar los esfuerzos encaminados a prevenir y controlar la hipertensión. Se calcula que en el mundo esta enfermedad afecta a más de uno de cada tres adultos de 25 o más años de edad: unos mil millones de personas. En España, hay 11 millones de personas (40%) que padecen esta enfermedad, de las que un tercio no sabe que están enfermas y otro tercio, aunque están tratadas, están mal controladas.

La hipertensión es un enemigo mortal y silencioso; es uno de los principales factores que contribuyen a causar cardiopatías y accidentes cerebrovasculares, que en conjunto representan la causa más importante de muerte prematura y discapacidad. Se estima que provoca cada año casi 9,4 millones de muertes por enfermedades del corazón, pero también contribuye a aumentar el riesgo de insuficiencia renal y de ceguera.

Detectarla es el primer paso para prevenirla y controlarla. En este Día Mundial de la Salud, la OMS hizo un llamamiento a todos los adultos para que se hagan medir la presión arterial. Cuando las personas conocen el nivel de su tensión, pueden actuar para controlarla. «Queremos que las personas tomen conciencia de la necesidad de que conozcan su nivel de tensión arterial, comprendan la gravedad de la hipertensión y decidan actuar para controlar su tensión», señaló Margaret Chan, Directora General de la OMS.

Pautas sencillas

En este sentido, Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia ha recordado algunas pautas que, si bien son importantes para preservar la salud en general, son cruciales para atajar los estragos que puede causar la hipertensión arterial:

* Erradicar el tabaco: dejar de fumar es la primera medida que hay que tomar: este hábito nocivo no solo ayuda a que suba la presión arterial sino que la suma de ambos factores incrementa en mucho el riesgo de sufrir un evento cardiovascular.

* Controlar la ingesta de sal: en nuestro entorno la tendencia es a «abusar» de este condimento, fácilmente sustituible por otros.

* Evitar las grasas: una dieta equilibrada es siempre recomendable.

* Moderar el consumo de alcohol: cuanto menos, mejor.

* Muévete: la realización de ejercicio con regularidad es más que beneficiosa. Se aconseja un mínimo de 30 minutos diarios, cuya intensidad se establece en función de cada persona.

También la Fundación Española del Corazón (FEC) ha recordado que junto a la hipertensión, el sedentarismo es uno de los principales factores de riesgo evitables. Con motivo del Día Mundial de la Actividad Física, también celebrado el sábado, se ha marcado como objetivo es que todo el mundo realice al menos 30 minutos de actividad física al día, ya sea practicando algún deporte o cambiando nuestra rutina diaria, como ir andando al trabajo, usar las escaleras en lugar del ascensor, etc.

La OMS también se ha mostrado preocupada tras conocer el alto índice de sedentarismo que existe en la población, ya que ya es considerado como el cuarto factor de riesgo de las enfermedades no transmisibles y al que se le atribuyen el 6% de las muertes mundiales.

www.abc.es/salud/noticias/hipertension-sedentarismo-pareja-mortal-14609.html